Que todo ha cambiado, que nadie se ha dado cuenta.

Vas por la calle, y te encuentras a una persona... una persona con la que has pasado momentos fantásticos, únicos, con la que lo has compartido todo... y ni siquiera os saludais.
¿Por qué? Porque la relación ya se ha perdido. Piensas: ¨tal vez, si hubiera llamado de vez en cuando, ahora no pasaría esto...¨. O simplemente imaginas que esa persona no se acordará de ti, que eres un simple peatón más por la calle...
Así, la vida va pasando, y por nuestro descuido, porque simplemente no nos damos cuenta, personas con las que hemos reído, llorado, disfrutado; personas que pensábamos que siempre estarían ahí, que les ayudaríamos en todo lo posible, con las que compartiríamos mil y una experiencias, van pasando, una detrás de otra, hasta que llega un momento en el que ya no son nada.